Desde el 1 de enero de 2018, la ley antifraude del IVA está en vigor y prevé fuertes sanciones, en caso de utilizar un software de caja que no cumpla con la normativa NF525. Este texto está dirigido a los sujetos pasivos del impuesto sobre el valor añadido que realicen operaciones en efectivo con particulares. Ya sea para un comerciante, una peluquería o un salón de belleza, es por tanto esencial comprobar la conformidad de los sistemas de caja con esta norma, para evitar posibles sanciones.

 

Software de caja registradora para peluquería
Software de caja registradora para Instituto de Belleza

 

¿Cuál es la diferencia entre una certificación y un atestado?

Tenga en cuenta, en primer lugar, que la ley antifraude no exige la certificación NF525 para todo el software de caja.

 

Para demostrar la conformidad de sus programas informáticos, el sujeto pasivo puede presentar documentos de un organismo autorizado o certificados facilitados por el editor o los editores. La certificación garantiza la calidad y fiabilidad de los sistemas de protección, archivo, registro y seguridad de un programa informático. Se obtiene tras una serie de verificaciones y validaciones realizadas por un organismo certificador.

 

El certificado, en cambio, lo prepara y emite el editor. Aunque este documento se puede presentar a las autoridades fiscales, no garantiza necesariamente que un sistema de caja registradora cumpla con todas las normas de la nf. Algunos programas no están exentos de anomalías y en caso de auditoría, las sanciones aplicadas pueden ser especialmente graves.
Para los titulares de programas informáticos que son objeto de certificados nominativos simples, se aconseja encarecidamente realizar algunas pruebas para comprobar que cumplen todos los requisitos de la norma.

Evaluación de la conformidad del software

Para iniciar la evaluación de la conformidad de un programa informático, lo ideal es examinar su sistema de seguimiento de datos.

 

En general, los sistemas de caja que cumplen con la normativa deben hacer un seguimiento no sólo de las eliminaciones y reimpresiones de billetes, sino también de las cancelaciones de billetes previamente cobrados, los cambios de fecha y las impresiones de versiones de prueba (modo escuela).

 

Tras este primer paso, es necesario comprobar si el software sigue permitiendo la aplicación de prácticas prohibidas:

 

  • Impresión del billete sin mención de duplicado
  • Impresión de tickets duplicados sin número único
  • Edición de billetes cobrados
  • Impresión de una nota sin ningún tipo de anexo a un billete cobrado
  • Impresión de un billete falso similar al billete
  • Imprimir un billete con un importe superior al original, etc.

 

Si el sistema de caja registradora impide que se realicen este tipo de transacciones, es indudable que cumple las normas NF525.

 

Para su información, no es imprescindible probar el software de Ikosoft certificado por organismos autorizados como Merlin, eMerlin o Merlin Air. Estos programas de Merlin han recibido la acreditación porque cumplen la norma vigente.

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